
Con Ford enfocándose en las versiones Darkhorse y GTD del Mustang, Shelby American ha desarrollado sus propios GT350 y GT350R que marcan un hito en la historia, ya que es un modelo completamente independiente de la firma estadounidense.

Esta edición especial conmemora los 60 años desde que Shelby colaboró por última vez con Ford para transformar el Mustang en un auto de alto desempeño. En un guiño al pasado, Shelby ha desarrollado este GT350 sin intervención de Ford, posicionando su sello “Shelby Performance” como emblema principal.




Presenta una salida de aire sobre el capó, nuevas rejillas, splitter frontal, diseño trasero tipo cola de pato y un spoiler trasero. También presenta los emblemas Shelby y las franjas Le Mans, mientras que el GT350R añade piezas en fibra de carbono y detalles especiales Shelby.

Por dentro presenta asientos tapizados en cuero, una placa con el número de serie y el pomo tipo bola de Shelby en las versiones manuales. El GT350R suma sillas deportivas y cinturones de 4 puntos Sparco, molduras en fibra de carbono y una jaula de seguridad.

El motor Coyote V8 de 5.0 litros incorpora un supercargador, sistema de escape Borla y varios cambios que elevan la potencia a 810 hp. Esto significa un aumento de 330 hp respecto a la versión atmosférica. Pero en el GT350R se puede subir a 830 hp, superando los 813 hp del Mustang GTD.

Cuenta con tracción trasera y se ofrece con una caja automática de 8 velocidades o manual de 6 marchas, la cual viene de serie en el GT350R.

Trae suspensiones con muelles rebajados y barras estabilizadoras más gruesas. El GT350R suma amortiguadores con reserva remota.

Shelby fabricará 565 unidades del GT350 y 36 del GT350R, un número que recuerda a los primeros Mustang Shelby producidos en 1965. Los GT350R serán preparados en conjunto con Turn Key Automotive/Motorsports.
Por: Ana Cantero
