Llega a Colombia lo que podemos considerar como el sedán de entrada de la marca de Stuttgart, el Mercedes Benz A180 AMG Line y en DriveGear pudimos probarlo para ustedes. Revisamos todos sus aspectos para darles nuestra opinión a nuestra manera. Recuerden, nosotros no tenemos la verdad en la boca, simplemente sabemos de autos y nos gustan, pero en realidad con este o con cualquier vehículo que estén considerando, les recomendamos ver nuestra reseña e ir a probarlos ustedes mismos en lo posible.
De entrada se ve como un auto moderno y se nota la aerodinámica puesta en función de este vehículo mostrando un perfil de líneas suaves y fluidas que resultan en un coeficiente aerodinámico (cd) de apenas 0.22 logrando un record de vehículos de producción para el año 2019. Es un auto que denota sofisticación, elegancia, pero también algo de deportividad en su diseño general, siendo un vehículo con unas proporciones no tan exageradas como los sedanes “medianos” o grandes de otros segmentos.
Para la versión A180, el vehículo monta un motor de 1.33 litros turbocargado que produce 134 hp de potencia y 200 Nm de torque. Este unidad motriz se acopla a una caja automática de siete velocidades de doble embraque que lo lleva de 0 a 100 km/h en 8.9 segundos, con velocidad máxima de 216 km/h y modos de manejo Dynamic Select. El funcionamiento de la caja es excepcional, trata de mantener al vehículo en el punto donde el motor entrega más torque o potencia de acuerdo a la necesidad. En el momento del arranque no es un vehículo particularmente rápido, pero más adelante da la sensación de ir llegando a más velocidad con cierta facilidad.
El paquete meramente estético AMG Line ofrece en el frontal un faldón con splitter en la zona baja, parrilla con rejilla tipo diamante y pasadores cromados. La zona trasera incluye un bumper en negro donde la zona baja incorpora un disfusor, mientras que a los lados se distinguen las salidas dobles de escape falsas con borde cromado. Adicionalmente cuenta con faldones laterales propios de esta versión además de rines AMG de 18″. Sin duda, estos pequeños cambios le dan un toque de dinamismo frente a las versiones “normales” de la Clase A sedán y que están muy bien incorporadas a la carrocería, pero que al fin y al cabo, debemos recordar que es simplemente estético.
El interior es uno de sus puntos más fuertes. Cuenta con asientos deportivos tapizados en cuero sintético con costuras en rojo, muy ergonómicos, con cambios de materiales notables que lo hacen ver y sentir muy premium. El volante muestra un aspecto deportivo e incluye múltiples mandos para controlar tanto la pantalla de información para el conductor, como el sistema de infoentretenmiento y aunque suene demasiada información para un par de dedos, en realidad el sistema no se siente pesado ni complicado de manejar, al contrario, es sorprendentemente fácil de aprender a utilizar, cosa que me sorprendió. El volante también incluye levas para cambio de marchas con una sensación muy cómoda al tacto.
Complementando el estilo general del auto, cuenta con varios detalles en aluminio cepillado como alrededor de las salidas del aire acondicionado, alrededor de la manija de las puertas frontales, el timón, e incluso repartido en las agarraderas de las puertas y en ciertos elementos de la consola central, entregando un aspecto un poco “posh” muy elegante y tecnológico al mismo tiempo. Eso si, en la consola central encontramos mucho uso del “piano black” que aunque nuevo se ve muy bien, se le marcan las manos y es propenso a rayones. La banca trasera oferce los mismos materiales de tapizado de los asientos delanteros con costuras en rojo, manteniendo la sensación premium. Cuenta con un espacio decente para pasajeros en la zona trasera además de una gran sensación de espacio gracias al techo panorámico. Aunque el carro no demuestra ser tan grande, el baúl es de 420 litros, más grande de lo que en primera instancia uno pensaría, pero que está en un tamaño apropiado para el vehículo.
La cereza del pastel la ofrece el sistema de infoentretenimiento MBUX el cual es el elemento más importante en mi opinión de este vehículo, ofreciendo varias formas de manipularlo. Como lo había mencionado antes, se puede manejar desde el volante, desde el panel háptico en la consola central, por medio de la pantalla táctil y finalmente por comandos de voz “Hey Mercedes”. Este sistema se ha mostrado muy sencillo de manejar y al mismo tiempo con infinidad de opciones, desde cambio de emisora, hasta la personalizacion de modos de manejo donde no solo la dinámica del auto cambia, sino que tambien la visualización de datos en las pantallas y los colores de los diales, además de la programación de la luz ambiental. Tal vez podría llegar a hacer falta que incluyera mapas y navegación dentro del sistema, pero a fin de cuentas, yo prefiero utilizar Waze desde Android Auto o Apple CarPlay que los sistemas integrados.
Con respecto a la dinámica, es un carro supremamente estable y bien plantado, no presenta movimientos que transmitan sensación de inseguridad. De hecho, la suspensión, a pesar una suspensión confort rabajada, presenta cierta rigidez, eso si, sin pasar al plano tan deportivo, como para incomodarlo a uno en las no muy prolijas calles de nuestra capital colombiana. Otro item que vale la pena resaltar, es que el sonido del motor ha sido “mejorado” para que suene más deportivo, cosa que si se siente, pero insisto, la deportividad no es la característica más fuerte del auto. Eso si, los modos de manejo si alteran la reactividad de la caja, del motor y de los frenos, cosa que se agradece.
De las principales razones por las que uno busca estos vehículos premium aparte de la comodidad y tecnología, cosas que como pueden haber leido antes, cumple a cabalidad, es la seguridad. Cuenta con 7 airbags, asistente de frenado autónomo, cámara de reversa, alerta de colisión frontal con detección de peatones y ciclistas, y en epecial, muy de mi gusto, la función de freno seco. Esta función detecta agua en el disco de freno y acerca la pastilla para remover esta capa de agua de manera que en caso de necesitar frenar, el sistema tendrá una mejor reacción y responsividad.
Sin duda no es el auto indicado para los que desean rendimiento, pero es el auto perfecto para aquellos que quieren movilizarse en un vehículo moderno con gran tecnología y un aspecto más juvenil. Este pequeño motor, junto con con su diseño aerodinámico y la calibración de la caja brinda una gran ventaja a la hora del consumo de combutible de alrededor de 56 km/galón en carretera y 43 km/galón en ciudad. Pero si lo que en realidad uno está buscando es un buen sistema de infoentretenmiento con mucha tecnología y un interior de gran calidad, este es el auto adecuado, compensando un poco su falta de potencia. Estas dos características son lo que en realidad más me ha gustado del vehículo, asegurando un éxito total con su robusto sistema MBUX.
Juan David Gomez: Director DriveGear
Créditos a las imágenes: Enrique Mathieu
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